Los destiladores de agua aseguran la producción de agua de alta pureza, que es especialmente esencial en experimentos muy sensibles, reacciones químicas y análisis microbiológicos. Por ejemplo, las pruebas de ADN y ARN requieren agua ultrapura para obtener resultados precisos y acertados. Similarmente, en los análisis toxicológicos y de trazas, el agua destilada juega un papel dominante para separar eficazmente las sustancias de interés y destacar su presencia.
Este equipo permite obtener agua con un alto nivel de pureza, a partir del agua potable. El agua destilada se caracteriza por carecer de solidos en suspensión por lo que es empleada en múltiples aplicaciones dentro de los laboratorios. El destilador copia el proceso del ciclo del agua.